Actividad vs proyecto

Muchas veces estos conceptos se mezclan. Leer en voz alta es una actividad, no cuenta como un proyecto. Hicimos esto en esta fecha y luego esto en otra fecha y luego esto otro. Esas son acciones. Y salió re-lindo.
La diferentes está en que un proyecto conlleva un diagnóstico (un punto de partida) y un resultado (un punto de llegada). La actividad es sólo la estrategia para llegar de un punto a otro.
Esto queda claro a la hora de pensar los objetivos generales y específicos.
El objetivo general apunta a qué resultado quiero conseguir y el específico a qué estrategia voy a utilizar. Dicho de otra forma: mi objetivo general es aumentar el número de préstamos de mi colección y el específico es leer en voz alta todos los días, mesa por mesa de la sala de lectura.
El punto inicial es que se prestan X cantidad de materiales por mes
El resultado al que aspiro es que se presten X+1 cantidad de materiales.
Esto es lo que voy a evaluar. -El resultado no es subjetivo (estuvo lleno de gente), es medible. El punto de partida es que se prestaban 10 materiales por mes y a partir de leerles a diario se prestan 15 materiales por mes. Un éxito.
Las actividades, entonces, pueden ser partes de mi proyecto general.
Si en una escuela quiero como objetivo general aumentar el consumo de literatura poética, puedo en cada actividad sumar a este gran resultado esperado: poesías del día de la bandera, del maestro, independencia, del libro, del autor, maratón de lectura, etc. Y usar diferentes técnicas: susurradores, talleres, clubes de lectura (las menos innovadoras) y usando toda mi creatividad; gamificación, intervenciones en el espacio público, murales, búsquedas en línea, plataformas, videojuegos, booktubers, tutoriales, inteligencia artificial, etc.
¿Qué resultados esperan obtener con cada acción que realizan? Los leo.
Y de paso les dejo una charla sobre el asunto si quieren ampliar.